jueves, 21 de noviembre de 2013

Vida en la ciudad y vida en el pueblo



Antes de venir aquí nunca había vivido en una ciudad, de hecho he siempre vivido en el mismo pequeño pueblo campestre desde que nací. Vivir en uno u otro lugar obviamente es muy diferente y como siempre hay en ambas situaciones aspectos positivos y negativos (teniendo en cuenta que estos juicios son subjetivos).
En la ciudad se puede encontrar más o menos todo lo que se quiere, supermercados y muchas tiendas para las compras, lugares para el ocio y para salir de marcha, numerosos otros servicios y oficinas que pueden ser útiles.  En un pueblo como el mío (unos 3000 habitantes) no se encuentran muchas cosas de esto tipo, si se necesita algo de un poco especial hay que ir a la ciudad más cerca, así como para hacer fiesta, aunque hay unos bares; también para ver a amigos, a veces hay que salir del pueblo, mientras en una ciudad están todos cerca el uno al otro. Lo que hay en un pequeño pueblo, pero, nunca se encontrará en una ciudad, estoy hablando de la sensación de estar “en el pleno campo y en la plena naturaleza”; es una sensación de libertad y tranquilidad y espacio libre, opuesto a la sensación de “opresión” y “clausura” en la ciudad (aunque depende de la ciudad, por ejemplo en San Sebastián, que tiene el mar y un tamaño no muy grande, no se siente mucho).
Una vez dicho esto, creo que es diferente para cada persona, porque cada uno tiene sus propios gustos, y también es probable que estos gustos cambien durante el ciclo de vida.
Y vosotros, ¿qué pensáis?

1 comentario:

  1. ¡Hola Mattia!

    He vivido tampoco en una ciudad antes de venir aquí y por eso creo que puedo entenderte bien. En mi pueblo hay 1300 habitantes solamente. Por eso yo no quería hacer Erasmus ni en Madrid ni en Barcelona porque pensaba que el cambia estaría muy grande. Hoy me parece bien mi decisión ir a San Sebastián. Para mí también San Sebastián es no demasiado grande, entonces el cambia esta no difícil. Los aspectos positivos aquí están el mar, las ofertas culturales y la vida urbana. Los aspectos positivos en mi pueblo están la naturaleza y la tranquilad. Estoy de acuerdo contigo, que cada persona tiene sus preferencias personales y que las preferencias pueden cambiar. Por eso aconsejo cada persona a vivir en una ciudad y vivir en un pueblo por volverse así más ella misma.

    Saludos,
    Michael

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